¡Hola adictos al rincón de las plantas medicinales!
¡Hoy es el turno de hablar un poco acerca de la popular y tan conocida manzanilla!
Como ya sabréis todos, la manzanilla se utiliza por su cantidad de propiedades curativas y estéticas y se ingiere mayormente como té, aunque también se puede utilizar en cremas y lociones.
¡Hoy es el turno de hablar un poco acerca de la popular y tan conocida manzanilla!
Como ya sabréis todos, la manzanilla se utiliza por su cantidad de propiedades curativas y estéticas y se ingiere mayormente como té, aunque también se puede utilizar en cremas y lociones.
La manzanilla o camomila común o romana (Chamaemelum nobile) es una hierba perenne de la familia de las asteráceas, nativa de Europa. Esta ya era aplicada en la Antigua Grecia, el Imperio Romano y Egipto, sin embargo fue en la Edad Media cuando se puso de moda. Su hábitat son lugares herbosos, suelos arenosos y prados. Necesita estaciones cálidas y climas templados para su correcto desarrollo, pero soporta bien cualquier clima frío, seco, etc.
Con respecto a sus propiedades, la manzanilla posee muy buenas propiedades digestivas al actuar como reparador y protector de la membrana gástrica y por lo cual es muy adecuada para todas aquellas infecciones vinculadas con órganos del aparato digestivo, favoreciendo las digestiones difíciles, ayudando a expulsar los gases del aparato digestivo, remediando el flato... Se recomienda beber una taza de té de manzanilla después de comer para aliviar dolores, calmar la pesadez e incluso para tratar úlceras, gastritis, diverticulitis y cólicos. Además, esta planta estimula la producción de bilis.
También es muy buena para tratar problemas respiratorios como el asma, bronquitis y resfriados. Tiene propiedades sedantes, permitiendo conseguir sueños más profundos en aquellas personas que tienen dificultad para dormir.
Por sus propiedades antisépticas las infusiones bien cargadas de manzanilla son ideales para realizar enjuagues bucales para cicatrizar más rápido aftas y herpes.
Para finalizar vamos a contaros como preparar la infusión de manzanilla de una manera sencilla y rápida. Simplemente debes calentar agua hasta que hierva y en una taza colocar una cucharada de hierva seca de manzanilla o también saquitos preparados ya. ¡Se deja reposar aproximadamente 3 minutos, se cuela y ya está lista para tomar!
También es muy buena para tratar problemas respiratorios como el asma, bronquitis y resfriados. Tiene propiedades sedantes, permitiendo conseguir sueños más profundos en aquellas personas que tienen dificultad para dormir.
Por sus propiedades antisépticas las infusiones bien cargadas de manzanilla son ideales para realizar enjuagues bucales para cicatrizar más rápido aftas y herpes.
Para finalizar vamos a contaros como preparar la infusión de manzanilla de una manera sencilla y rápida. Simplemente debes calentar agua hasta que hierva y en una taza colocar una cucharada de hierva seca de manzanilla o también saquitos preparados ya. ¡Se deja reposar aproximadamente 3 minutos, se cuela y ya está lista para tomar!
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